18/03/20
Las operaciones digitales de la Industria 4.0 están en la agenda de las empresas alrededor del mundo, aun así, la mayoría de los líderes empresariales no están incorporando a sus estrategias los desafíos, oportunidades de transformación ni el salto conceptual que representan.
A diferencia de la Industria 3.0, que implicaba la automatización de máquinas y procesos individuales, la “cuarta revolución” abarca la digitalización de extremo a extremo y la integración de datos de la cadena de valor: ofreciendo productos y servicios digitales, operando activos físicos y virtuales conectados, transformando e integrando operaciones y actividades internas, creando alianzas y optimizando las actividades orientadas al cliente.
“Dominar la Industria 4.0 requiere una comprensión profunda de la colaboración, compromiso de la alta dirección y una estrategia clara. Las empresas que no adopten esos cambios probablemente lucharán por sobrevivir. En la actualidad unas pocas ya se encuentran preparadas y son las que llamamos “Digital Champions”, comenta Norberto Montero, socio de PwC Argentina, líder del área de Consultoría.
A pesar de que la Industria 4.0 está transformando rápidamente la producción de una forma que era inimaginable hace una década- solo un grupo reducido de empresas está en una posición de ganar ventajas competitivas reales de dicha revolución y son dignas de atención porque conciben la digitalización de manera ambiciosa e innovadora, mucho más allá de la mera automatización y gestión de la tecnología.
Para entender su visión, estructura, capacidades y por qué son exitosas, exploramos los factores que tienen en común y las lleva a diferenciarse del resto de las organizaciones y encontramos que su dominio se destaca en cuatro estratos fundamentales dentro del ecosistema de negocios: Soluciones para Clientes, Operaciones, Tecnología y Personas.
No todas las “Digital Champions” son igualmente expertas en cada uno de los ecosistemas. Algunas poseen una cultura digital relativamente madura, mientras que otras tienen socios externos integrados en el desarrollo de productos/ servicios y estrategias para salir al mercado. Otras son aún mejores para implementar una cadena de abastecimiento completamente transparente e integrada. En conjunto, se diferencian por progresar en sus capacidades en los cuatro ecosistemas, creando un entorno organizacional que aprovecha al máximo las oportunidades de digitalización. Sus capacidades y liderazgo se traducen en una posición privilegiada en términos de madurez digital. Solo el 10% de las compañías encuestadas pueden reclamar el título de Campeones Digitales.
Estas empresas, para desarrollar los cuatro ecosistemas, se inspiran en socios y plataformas internos y externos y también los combinan en una sola estructura de trabajo, alineando sus organizaciones alrededor de una estrategia clara y coherente con base en propuestas de valor y capacidades que los distinguen.
Ninguno de los ecosistemas puede ser omitido ya que no resulta suficiente diseñar una plataforma de Soluciones para Clientes que sea lógica en términos estratégicos, se una bien al engranaje de las condiciones de mercado, pero falle el ecosistema de Operaciones porque carece de las capacidades, asociaciones, tecnología y planes para propulsar la eficiencia y efectividad que se requieren.
Según los datos de una encuesta realizada por PwC, entre las industrias a nivel global, la automotriz y la electrónica acaparan la porción más grande de “Digital Champions”, con un 20% y 14%, respectivamente. Las operaciones en las empresas automotrices se han optimizado, automatizado y conectado por décadas, y los fabricantes de electrónica han estado en la vanguardia de la fabricación tercerizada que requiere conectar y administrar sistemas diferentes en una cadena de valor extendida.
“Las verdaderas “Digital Champions” se dedican a diseñar las estrategias de los cuatro ecosistemas en sintonía, se aseguran de integrarlas efectivamente con los stakeholders y les dan valor a sus capacidades. Se ubican en el centro de una cadena de valor extendida, innovadora y eficiente que optimiza la tecnología y las personas”, finaliza Montero.